Metamorfosis de frontera

Después de algunos conflictivos acercamientos a la licenciatura en Comunicación Social, desde el año 1995 Patricio Eduardo Elizalde se dedicó en exclusividad a las artes escénicas; primero como actor, tanto en instituciones reconocidas y formales como en la misma calle y en eventos performáticos periféricos. Luego desarrolló una prolífica carrera como intérprete y coreógrafo de danza contemporánea, lenguaje donde realizó sus estudios superiores para dedicarse a la docencia en diferentes ámbitos académicos. Sus trabajos artísticos fueron premiados en Argentina, destacándose como director de teatro y luego como dramaturgo. Ese último lenguaje lo vinculó más directamente con la escritura, donde continúa realizando una fusión provocativa de los límites en los lenguajes, mostrando incertidumbres y contradicciones de un ser consciente políticamente en relación con su intimidad, su sexualidad y su deseo. En su primera novela, Metamorfosis de frontera, se permite aproximarse a lo absurdo, pero también un crudo acercamiento a la dificultad de la trascendencia de lo mundano. En sus textos se conjugan su experiencia escénica, su cosmovisión y sus preguntas sobre el arte.